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Desde que se arrancó éste proyecto en la ciudad de Morelia, hemos obtenido diversas y variadas experiencias sobre el uso de biodiesel en distintos vehículos con motor a diesel. Como ya sabemos nuestro país no ha sido muy afortunado en cuanto a vehículos de éste tipo, y esto es debido a que la calidad del diesel de Pemex no ha permitido que las diversas marcas automotrices nos ofrezcan sus demás vertientes con motores diesel como lo hacen en el resto del mundo, principalmente en la Unión europea, donde han encontrado en éste tipo de vehículos un excelente aliado para combatir la contaminación usando biodiesel.

Antecedentes

Durante el 2006 y  el 2007,  se decidió realizar una investigación poniendo a prueba el uso de biodiesel en distintas proporciones (B5, B10, B20, B50 y B100) a diversos vehículos con motores diesel para estudiar sus prestaciones como combustible alternativo.

El experimento fue totalmente pionero pues por primera vez se empleó biodiesel proveniente de aceites de cocina usados que de otra manera hubieran ido a parar al drenaje.

Además existe poca información respecto a la opinión de los choferes al usar biodiesel, así que el experimento consistiría en contribuir a cubrir esa falta de información. También serviría para observar las posibles fallas que pudieran surgir al emplear biodiesel en los motores, de manera que no se llevó a cabo ninguna modificación en los mismos.

Al inicio de la experiencia se repartieron una serie de cuestionarios dirigidos tanto a los conductores de los vehículos como a los dueños, e inclusive al personal técnico encargado del mantenimiento de los mismos. Con los cuestionarios se pretendía pulsar la opinión de todos los usuarios implicados en el ciclo de uso del biodiesel.

Los resultados se pueden resumir por temas como sigue:
  • Humos y olores

Las dos características más evidentes de la sustitución del diesel por biodiesel y a las que hicieron referencia la inmensa mayoría de los encuestados, fueron la práctica desaparición de los humos negros en el tubo de escape y la sustitución del habitual olor acre de los gases de escape por un olor a freidora o parrilla. EL 90% de los encuestados comprobó que el olor emitido por el biodiesel era más agradable que el habitual del diesel. Y no sólo eso, sino que también es menos tóxico.

  • Consumo de combustible

Se produjeron ligeras fluctuaciones con respecto al consumo habitual de los vehículos. La mayoría midió un consumo similar usando ambos combustibles.

Varios conductores informaron de una disminución de alrededor de un 5% en el consumo de combustible con el uso de biodiesel. Hubo conductores por otro lado midieron un aumento del consumo aproximadamente en la misma proporción. Sin embargo, las fluctuaciones pueden ser interpretadas también circunstancialmente en función de los modos de conducir.

  • Ruido del motor.

Algunos conductores se percataron de que el ruido del motor era ligeramente inferior mientras se usaba biodiesel. El motor sonaba “más suave»,  «como amortiguado». Esto es debido al efecto de mayor poder lubricante del biodiesel.

  • Desgaste del motor y aceite lubricante

El consumo de aceite lubricante se mantuvo en los mismos términos en todos los vehículos y al cambiarlo no se observó una mayor degradación del mismo. Los técnicos de mantenimiento encuestados dijeron haber constatado un menor ensuciamiento en los asientos de los inyectores del motor al que suele ser habitual empleando diesel convencional. Una de las más conocidas propiedades del biodiesel es su poder lubricante el cual alarga considerablemente la vida de los motores.

  • Prestaciones del motor

La mayoría de los conductores informaron que los vehículos arrancaron siempre al primer intento incluso en un mes invernal como diciembre o enero. Comentan que el humo que sale al encender el motor en frío es blanco y a veces en exceso, pero que una vez caliente el motor, los deja de emitir.

  • Temperatura del motor

El 100% de los encuestados también informa de que la temperatura del motor se mantiene igual con el diesel convencional.

  • Comportamiento del vehículo

En cuanto al comportamiento del vehículo con el uso del biodiesel se produjo una mayor discrepancia de opiniones entre los conductores aunque cabe destacar que existieron diferentes factores que probablemente  fueron la causa.

Entre las variables destacan:

  • La proporción de dilución del diesel
  • Los diferentes modos de conducir
  • El peso que llevaba el vehículo al usarlo
  • La carretera
  • Y la presión de los neumáticos
Las respuestas a sí observaban un aumento o disminución de potencia en determinadas circunstancias quedaron de la siguiente manera:
  • Después de una parada, un 25% constató un ligero aumento de potencia respecto al uso del diesel convencional, un 25% una ligera disminución y el 50% opinó que la potencia desarrollada por el biodiesel era la misma.
  • En terreno plano, un tercio de los encuestados informó que notaba un aumento de potencia con el biodiesel, un 16% notó una disminución y la mitad de los encuestados opinó que la potencia desarrollada era la misma que la habitual.
  • En pendiente ascendente, un 20% notó un aumento de potencia mientras que en este caso un 60% informo una ligera disminución y el 20% restante opinó que la potencia era la misma.

Es de destacar que los conductores de automóviles chicos, de tipo familiar o de camionetas tipo pick-up notaron un ligero aumento de potencia con el uso de biodiesel, mientras que los conductores de servicio de carga reportaron mayoritariamente que la potencia fue menor usando biodiesel.

¿ A que se debe este decremento en la potencia si el biodiesel tiene mayor número de cetanos que el diesel?

La mezcla de diesel y biodiesel no requiere de modificaciones en los motores, pero para que el motor funcione con 100% de biodiesel requieren de una pequeña modificación. El biodiesel tiene mayor número de cetanos (48-60) que el diesel (46) y para su correcta “puesta a tiempo” sólo hay que ajustar la bomba de inyección. Esto permitirá obtener el verdadero potencial del biodiesel y por ende su motor trabajará más frío. Es un proceso similar a girar el distribuidor en un carro de gasolina.

Hoy en día, nuestra producción está comprometida principalmente en la ciudad de Morelia con 3 empresas que lo utilizan en sus vehículos y los excedentes son utilizados por el Grupo Perc.